Terminator: 1ª parte. Las películas.

Corría el año 1984 cuando se estrenaba una de las mejores películas que se recuerdan de los años 80. Esa película era Terminator. La dirigía James Cameron, en su primera película importante (segunda que dirigía tras Piraña 2). Y en su reparto, Arnold Schwarzenegger, Linda Hamilton y Michael Biehn.

El argumento era algo relativamente simple: un androide, un terminator modelo T-800, era mandado atrás en el tiempo para matar a Sarah Connor, una camarera que tendría un hijo, John, quien se convertiría en uno de los líderes de la resistencia contra las máquinas en una guerra que tendría lugar en un futuro apocalíptico tras el "día del juicio final". Ese día era concretamente el día en que las máquinas provocaron que se disparasen cientos de armas nucleares, provocando un devastación descomunal en la tierra. Frente al terminator, la resistencía enviaría a un humano, Kyle Resse, a proteger a Sarah Connor. El año es el mismo del estreno: 1984

Rodada con un presupuesto digno de serie B, Terminator obtuvó tal éxito que en 1991 Cameron dirigió una secuela espectacular, considerada como una de las mejores segundas partes de la historia del cine. Ambientada en 1997, repetían Schwarzenegger y Hamilton. Además, se incorporaban Robert Patrick y Edward Furlong. Los dos primeros repetian sus papeles, con la diferencia de que Chuache era un T-800 reprogamado por el futuro John Connor, quien le enviaba para protegerse a sí mismo cuando era un niño (bastante rebelde por cierto), interpretado por Furlong. Por otra parte, las máquinas envian a un T-1000, un nuevo modelo de terminator, construido en una aleación líquida capaz de adoptar cualquier forma de su mismo tamaño o volumen, interpretado por Robert Patrick. Cabe decir que el terminator de Chuache era el mismo modelo, pero no el mismo terminator.

A pesar de repetir el esquema de la película original, T2 superaba en presupuesto y espectacularidad a la primera, haciendo rapidamente de ella una película de culto.

En 2003 llegaba Terminator 3: la rebelión de las máquinas, donde asistiriamos al inicio de la guerra. Pero nuevamente intentarian acabar en el pasado con John Connor, concretamente en el año 2004. En esta ocasión, enviaban a una T-X, un modelo de terminator muy superior al T-1000, y que adopta una forma femenina para su objetivo, que además de Connor son otros hombres destinados a convertirse en los líderes de la resistencia. Con Schwarzenegger como T-800, Kristanna Loken como T-X, y Nick Stahl como Connor, se incorporaba un nuevo personaje: Kate Brewster, futura esposa de Connor. En esta ocasión la dirección corría a cargo de Jonathan Mostow. Sin ser un fracaso, Terminator 3 no fue en general bien recibida por crítica ni público, pero en mi opinión, aun siendo inferior, tiene muy buenos momentos, además de enlazar perfectamente con el tema de la guerra entre máquinas y humanos.

A pesar de todo lo visto, la gente quería más. Queriamos ver la guerra, únicamente vislumbrada a través de pequeños retazos en las tres películas.

Y es así como en este 2009 ha llegado Terminator salvation, cuarta película de la saga, ambientada en la guerra, en los inicios de los personajes más importantes de la resistencia, como Kyle Reese. Dirigida por McG, cuenta con Christian Bale como John Connor. El argumento se centra en la busqueda de Kyle Reese, un civil que se ha descubierto que es objetivo primordial de las máquinas. Mientras tanto, la resistencia consigue un código que puede acabar con las máquinas. Por otro lado, un hombre llamado Marcus entra en contacto con Kyle y ambos buscarán un medio de contactar con Connor, del que no saben más que su voz cuando le escuchan por radio.